Rubén Darío Ávalos Flores: escritor encarnaceno y referente de vida


A corta edad es admirable la inspiración que lo impulsa a escribir y publicar sus obras. Nuestro coterráneo y niño escritor es de una personalidad cálida, sencilla y persuasiva. Entre tantas consultas, nos impulsa a saber ¿cómo piensa?, ¿cuál es su propósito en la vida?, ¿quién lo inspira?, cuestiones que nos responde aquí.

–          ¿Qué situación te impulsó a escribir?

–          Debido a que siempre tenía fiebre, dolores, náuseas, estaba casi todo el tiempo en mi casa, reposando. Para entretenerme, me ponía a leer libros de todo tipo, y con mi imaginación viajaba por todo el mundo, todas las épocas… Hasta que finalmente decidí inventar mi propio mundo, mi propia época, mis propios personajes e historias.

–          ¿Qué respuesta sientes ahora respecto de tus lectores? 

–          Agradezco mucho su apoyo, pues gracias a ello y con la bendición de Dios, mis libros han conseguido unas cuantas ediciones y han llegado a varios países como Estados Unidos, México, Italia, Brasil, Argentina y Paraguay… La verdad es que mi obra ha obtenido una notable aceptación por parte de mis lectores, y yo intento en agradecimiento mejorar a cada relato que escribo, poner cada vez más esmero, concentración, amor, cariño, interés y paciencia, practicar mucho escribiendo varias historias, para conseguir la calidad que esperan de mí, y si es posible, más.

–          Cuando no escribes, ¿cómo nutres tu intelecto para próximas obras?  

–          Leyendo, por supuesto. Uno de mis autores favoritos, Jorge Luis Borges, decía que para ser un buen escritor, hay que ser mil veces un buen lector. Leo a autores tan variados como pueden ser nuestro compatriota Augusto Roa Bastos, Robert Louis Stevenson, Franz Kafka,  Miguel de Cervantes, Julio Verne, Ernest Hemingway, Homero,  Mark Twain, William Shakespeare,  Horacio Quiroga, Edgar Allan Poe, Gabriel García Márquez, Manuel Gálvez, Julio Cortázar, Mario Vargas Llosa… De vez en cuando, también veo las películas basadas en sus obras, y me encanta relajarme contemplando la naturaleza, además de meditar para descansar la mente y tenerla preparada para nuevas ideas.

–          ¿Cuál es el significado que le das a la vida en estos tiempos de la humanidad?

–          En estos tiempos, se necesita más amor. Con amor todo se puede lograr, todo se puede conseguir, es la fuerza más grande del universo. En el amor es donde vive Dios. El amor escasea bastante últimamente, con las guerras, la corrupción, la crisis, el cambio climático… Pero todo esto se puede cambiar, se puede mejorar aprendiendo a respetar la vida en su totalidad: a las demás personas, a los animales, a las plantas e incluso a las rocas. Debemos aprender y enseñar a amar, para poder mejorar el mundo, y cada acto que hagamos, siempre y cuando lo hagamos con amor, lo haremos bien.

–          ¿Quién es el principal pilar intelectual de tu vida?

–          Mi madre. Ella es inigualable, está a mi cuidado las 24 horas del día los 365 días del año. Fue ella quien me inculcó el hábito de la lectura, leyéndome cuando aún yo no sabía. Es mi gran superheroína, he escrito varios cuentos donde aparecen personajes basados en mi madre.

–          ¿Qué cualidades resaltas de tu papá y de tu mamá?

–          Ambos son incansables trabajadores de mucha inteligencia. Personas muy cultas, humildes y trabajadoras.

–          ¿Cómo haces para administrar los altibajos de tantas emociones juntas?

–          Lo veo todo, como una unidad. Todo es uno, todos somos uno. No existe ni lo malo ni lo bueno, ni hay alguien superior ni inferior, ni la tristeza ni la felicidad, realmente se tratan de una misma cosa, de un equilibrio que es necesario, dos caras de una misma moneda, y uno puede elegir qué cara de esa moneda quiere ver y recordar.

–          ¿Qué le dirías a un niño acerca del valor de escribir?rubén4

–          Con la escritura, uno puede divertirse, creando personajes y situaciones que a uno le gustaría vivir, o desea que ocurran así… Puedes desahogarte escribiendo lo que no te gusta de tu vida,  o tal vez cambiándolo por algo que sí te gusta. La escritura es el reflejo del alma, en ella puedes hacer todo lo que quieras, todo lo que desees. Conocer otras épocas, otros países, tener nuevos amigos, enemigos… Puede ocurrir todo lo que desees. De paso que te diviertes, mejoras tu ortografía, amplias tu vocabulario, aumentas mucho tu memoria y te conviertas en una persona más feliz, por ello espero y deseo de todo corazón que todos los niños y niñas del mundo pueden leer mucho y escribir.

–          Si lo deseas; ¿describirías qué fue lo más bello qué soñaste la última vez?

–          Una paloma blanca entraba en mi habitación y me llevaba volando por los sitios más bonitos que uno pudiera imaginar.

–          ¿Que extrañas de Encarnación?

Ningún lugar es igual a otro, y claro, al estar tan lejos de Paraguay añoro mucho sus comidas típicas, como la chipa, el reviro, las tortillas, las empanadas… Por eso, cada vez que el médico me da permiso, le pido a mi mamá que me prepare unas cuantas. También extraño toda la inmensa variedad de fauna y flora que se podía disfrutar. Pero yo siempre reflejo estos recuerdos en mis cuentos, recreándolos en diversas situaciones y personajes.

 

Fuente: Departamento de Comunicaciones (DCOM) ¿Desea acceder a uno de sus libros?

 



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