Estos fueron los principales contenidos desarrollados por la licenciada en Psicología, Lucila Florencia Servian, que orientó a los funcionarios directivos del Rectorado sobre la importancia y proceso de la comunicación interpersonal, de las decisiones asertivas y el manejo de las relaciones interpersonales como estrategia de comunicación organizacional.
La técnica dinámica ‘hilo rojo’ fue aplicada como introducción del taller, un espacio para que los participantes pudieran expresar sus expectativas acerca de la capacitación y sus principales temores, entre ellos, el deseo de percibir las relaciones interpersonales con impacto efectivo y que contenga la armonía laboral y, por la otra parte, el miedo que no mejore el desarrollo de la personalidad y se pierda la confianza en el clima de las relaciones de trabajo.
Asistió al mismo, el Rector de la Universidad Nacional de Itapúa (UNI), Ing. Hildegardo González Irala, junto con la Vicerrectora, Prof. Yilda Agüero de Talavera, quienes estuvieron acompañados de un grupo de directivos y jefes de áreas.
No hubiera sido posible el taller sin la coordinación del Departamento de Recursos Humanos, que previó esta actividad en respuesta a un diagnóstico realizado sobre 31 entrevistas personalizadas que revelaron las fortalezas y las debilidades del ambiente de trabajo en la institución.
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Se abordaron aspectos relacionados a los efectos de las evaluaciones de desempeño y la importancia de las sanciones; la autoestima personal y sus ingredientes, es decir, de qué modo se alimenta el amor propio del funcionario para lograr relaciones interpersonales; la actitud pasiva o agresiva como reacción ante los conflictos, sus causas y efectos. Aquí la instructora añadió que debe considerarse lo que piensa el interlocutor, respetando su nivel de conocimiento, sus sentimientos, sus pensamientos, su forma de actuar, a los efectos de acordar la manera de resolver los conflictos y mejorar la relación.
En otro instante habló de evitar la mimetización, referido al concepto genérico o popular de lo que se dice de algo o alguien y luego prejusgar. Aprender a decodificar (descifrar) con prudencia los mensajes emitidos por nuestros interlocutores antes de emitir un juicio erróneo o de desconsideración, también fue otro aspecto analizado.
Uno de los principales límites es la comunicación es la falta de claridad de los mensajes que se difunden, algunos con datos incompletos, otros mal intencionados o tecnicamente inventados, lo que genera incertidumbre y fricción en el ambiente.
El taller culminó con la presentación de una olla negra de hierro, elemento popular de la campiña paraguaya, pero cargada de dulces, representando uno de los ingredientes de nuestra actitud como parte de la autoestima», concluyó Servián.
Fuente: Departamento de Comunicaciones del Rectorado (UNI)
Muy bien! Investigué este tema durante dos años y lo expliqué en mi defensa de tesis doctoral en 2011: «Asertividad en el liderazgo educativo del siglo XXI». Es el camino.