Estudiante de CyT en Brasil habla de su experiencia

Encarnación, 4 de mayo de 2012.

Julie Elizabeth Samaniego, es estudiante universitaria del 8vo. Semestre de la Licenciatura en Ciencias y Tecnología de la Producción Aplicada a los Alimentos, de la Facultad de Ciencias y Tecnología (FaCyT) de la Universidad Nacional de Itapúa (UNI) y en entrevista con el Departamento de Comunicaciones (Dcom) nos describe su experiencia como alumna de intercambio, a través del Programa Escala Estudiantil de la Asociación de Universidades del Grupo Montevideo (AUGM). En la foto, Carmen Bogado y Susana Fedoruk con Julie durante su breve visita por la UNI.

Hoy reside en la ciudad de San José “Do Rio Preto”, Estado de San Pablo, Brasil. De paso por la UNI, nos confirmó que retomará las clases el próximo lunes y se extenderá hasta el mes de julio. La experiencia dura un semestre.

Nos dijo que sus jornadas académicas “son clases integrales, que van desde las 8 de la mañana hasta las 18 horas”. Nos explicó que los docentes presentan y desarrollan sus clases por medio de proyección multimedia, “los profesores nos facilitan los libros. Hay muchos trabajos prácticos que realizar y proyectos que desarrollar. Accedo constantemente a bibliotecas virtuales y convencionales porque exigen mucha investigación, mucha lectura”, nos relata Samaniego.

Como otros estudiantes de intercambio, nuestra entrevistada nos dijo que los primeros días de clases tienen problemas de lenguaje (portugués) para lograr el aprendizaje, “pero actualmente me estoy adaptando bien. En este sentido, asisto 2 veces a cursos de portugués y luego enseño español como una manera de intercambio”, dice Julie con confianza. “Ellos te hacen sentir como en tu casa, te ayudan y colaboran en el estudio. Los docentes son más atentos con nosotros y expresan más apertura a nuestras consultas, en especial si somos extranjeros”, indicó.

Características de la ciudad

“Estoy distante a 6 horas de San Pablo. Es una ciudad muy bonita, San José”, nos describe. El barrio donde ella hospeda se llama Jardín Nazareth, “está en el centro de la ciudad. Allí vivo en una casa particular con 8 personas; la llaman república”, argumenta. A su vez, informa que todos los alumnos alquilan esa casa en conjunto, “estamos entre varios estudiantes de todas las carreras, es decir, de informática, de letras, de ingeniería y tenemos horarios diferentes de estudios; de mañana, tarde y noche”, detalla con entusiasmo.

Nos dice que durante los fines de semanas salen en grupo a recorrer otras ciudades, integrándose con otras culturas, “pues nadie del grupo de estudiante es de esta ciudad”, afirma.

Al finalizar la entrevista, nos expresa sentirse segura en el ambiente áulico, “soy una alumna regular, estoy matriculada académicamente, tengo mi registro de estudiante”. Emite un mensaje a las autoridades: “La UNI me ayudó bastante, me abrió las puertas. Esta experiencia me da la oportunidad de crecer y adquirir más conocimientos. Ya tengo propuestas de los docentes de hacer mi doctorado en esa universidad, ellos desean orientarme en mi trabajo final de grado”, habla con emoción Samaniego, al final de esta entrevista.